viernes, 10 de enero de 2014

No temerás...



Salmo 91

El que habita al abrigo del Altísimo
se acoge a la sombra del Todopoderoso.

Yo le digo al Señor: «Tú eres mi refugio,
mi fortaleza, el Dios en quien confío.»

Sólo él puede librarte de las trampas del cazador
y de mortíferas plagas,

pues te cubrirá con sus plumas
y bajo sus alas hallarás refugio.
¡Su verdad será tu escudo y tu baluarte!

No temerás el terror de la noche,
ni la flecha que vuela de día,

ni la peste que acecha en las sombras
ni la plaga que destruye a mediodía.

Podrán caer mil a tu izquierda,
y diez mil a tu derecha,
pero a ti no te afectará.

No tendrás más que abrir bien los ojos,
para ver a los impíos recibir su merecido.

Ya que has puesto al Señor por tu refugio,
al Altísimo por tu protección,

ningún mal habrá de sobrevenirte,
ninguna calamidad llegará a tu hogar.

Porque él ordenará que sus ángeles
te cuiden en todos tus caminos.

Con sus propias manos te levantarán
para que no tropieces con piedra alguna.

Aplastarás al león y a la víbora;
¡hollarás fieras y serpientes!

«Yo lo libraré, porque él se acoge a mí;
lo protegeré, porque reconoce mi nombre.

Él me invocará, y yo le responderé;
estaré con él en momentos de angustia;
lo libraré y lo llenaré de honores.

Lo colmaré con muchos años de vida
y le haré gozar de mi *salvación.»


Fotografía: Steve McCurry

jueves, 2 de enero de 2014

Segundos afuera!


Y así estoy… frente a la vida… No hay nada ni nadie, sólo yo…
Los demás… están afuera, algunos atentos, otros distraídos…Algunos bajan rápido del cuadrilátero, otros se quedan al otro lado de las cuerdas para darme una mano cuando caigo…
La pelea es sólo mía, me juego todo y no hay quién pueda hacerlo por mi…
Siento soledad, abandono, desesperación, pero no hay alternativa, ni descanso.
Es ahora, es inevitable…

Segundos afuera!!